Nueva Zelanda
Un país en las Antípodas de lo que esperas…Resumen de un viaje a las dos islas.

Puerto de Auckland
La isla Norte:
Mucho más habitada, sorprende por su desarrollo con ciudades con Auckland donde hay un yate por cada tres habitantes.

Panorámica de la ciudad más poblada y dinámica.

Marina.
Pasear por su puerto deportivo, es imprescindible.

Nos faltó tiempo.
Las costas neozelandesas:
Son mucho más seguras que las de su vecino Australia, con ausencia de tiburones y plagas de medusas. Dedicar un día a bañarse en sus playas vírgenes es una maravilla.

Parque regional de Muriwai
Visitando a los Hobbits
En las Isla norte se encuentra Hobbitton, lugar donde grabaron: el Señor de los Anillos.

Hobbiton

Hobbiton
Realmente el parque de los Hobbits, gusta porque el trabajo de jardinería es soberbio. También te explican detalles sobre la filmación de la película muy curiosos.

Cerveza hobbit

Te Puia, reserva termal
El poder del interior de la Tierra:
Las dos islas, son de origen volcánico pero la norte dispone de instalaciones para visitar sus fuentes termales, en un entorno alucinante.

Waimangu

Waimangu
Nos vamos a la isla meridional.
Ahora bien, es en el sur donde sus paisajes te atraparan.

Lago Tekapo

Mirad qué colores.
En kilómetros … nadie … sólo naturaleza y silencio.

Amanecer.

Carretera a Waimangu

Mackenzie Country

Lago Wanaka

Lago Wakatipu

Vamos a navegar.

Embarcadero de Queenstown
Una ciudad para vivir a gusto.
En Queenstown encontré mucha población emigrante trabajando y muy integrados y felices. Las leyes son muy estrictas para renovar el permiso de trabajo, pero se ve que también son muy efectivas.

Iglesia

Noche

Camino a Milford Sound
El viaje todavía más bello que el destino.
El fiordo de Milford Sound, es bello…. pero aún me gustó más su carretera.

Vista en Helicóptero de Milford Sound

Monte Cook

Primer puénting del mundo

Si vas a Queenstown, no te pierdas la experiencia de Shotover Jet
La aventura
Puede parecer peligroso, pero no lo es salvo que te dé un latigazo cervical. Yo no he sentido tanta adrenalina nunca.